El problema de las tres puertas en un clásico de los problemas de probabilidad el cual surgió a partir de un concurso televisivo presentado por Monty Hall, por lo que también se le conoce como problema de Monty Hall.

Enunciado del problema de las tres puertas

Estás en un concurso de televisión delante de tres puertas cerradas. Se sabe que detrás de una de esas puertas hay un automóvil, mientras que tras las otras dos hay simplemente una cabra, pero no se sabe que hay tras cada puerta.

En primer lugar, el presentador te pide que elijas una de las tres puertas, siendo el premio que te llevarás el que se encuentre detrás de la puerta elegida. Eliges una puerta y, como es normal, quieres ganar el coche.

A continuación, el presentador abrirá una de las puertas que no has elegido, y siempre habrá una cabra detrás de esa puerta. Por tanto, nos quedan en las otras dos puertas la otra cabra y el automóvil.

En ese momento el presentador te preguntará si quieres cambiar de puerta o mantener la elegida inicialmente. ¿Qué debes hacer? ¿Cambiarías a la otra puerta o te quedarías con la que habías seleccionado inicialmente?

Muñeco eligiendo puerta


Solución al problema de las tres puertas

¿Ya has decidido con qué puerta quedarte? ¿Estás seguro?

Estadísticamente, inicialmente teníamos 3 puertas, por lo que la probabilidad de que el coche esté en la seleccionada es de 1/3, mientras que la probabilidad de que esté una cabra es de 2/3.

Una vez abierta la puerta de la cabra por el presentador es erróneo pensar que las probabilidades de que el coche esté en cada una de las dos puertas que quedan cerradas son la misma (50% ó 1/2), ya que el presentador siempre abre la puerta en la que hay una cabra, sabiendo este hecho de antemano. Por tanto, las probabilidades iniciales se mantienen. Esto es debido a que pueden pasar las 3 siguientes situaciones:

- Probabilidad 1/3: Eliges inicialmente la puerta que tiene el coche. El presentador abre la puerta de una cabra. Tu cambias de puerta y por tanto pierdes el coche, pero si te quedas con la misma puerta ganas el coche.

- Probabilidad 2/3: Eliges inicialmente la puerta que tiene una cabra. El presentador abre la puerta que tiene la otra cabra. Tu cambias de puerta y por tanto ganas el coche, pero si te quedas con la misma puerta lo pierdes.

Resumiendo, si te quedas con la puerta que elegiste inicialmente tendrás 1/3 de posibilidades de ganar el coche, mientras que si cambias de puerta tendrás 2/3.

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Publicado por Javi Martínez el miércoles, 13 de abril de 2011


El calambur es un juego de palabras o figura literaria consisten en modificar el significado literal de una palabra o frase agrupando de distintas formas sus sílabas. De esta forma la figura del calambur se ha utilizado frecuentemente para la creación de pequeñas adivinanzas o acertijos para niños. Pero, antes de centrarnos en ellos vamos a ver a continuación ejemplos un poco más "serios"

El calambur en la literatura

El calambur más famoso en la literatura española es seguramente el creado por Quevedo, quien se apostó una cena con sus amigos a que era capaz de decirle a la reina Isabel (esposa de Felipe IV) que era coja (hecho totalmente real y que enojaba a la reina). Así, tras comprar un ramo de claveles y otro de rosas se acercó a su majestad y le dijo los siguientes versos:

Entre el clavel blanco y la rosa roja,
su majestad escoja

Versos en los que podemos ver como juega con el doble sentido de "escoja" -> "es coja"

Pero no ha sido Quevedo el único gran escritor en utilizar la figura del calambur. Así, por ejemplo también tenemos a:

- Gracián, jugando con la palabra "Dios" y el ver "dar"
El sacro y adorado nombre de Dios, que dividido está diciendo: “Díos, díos la vida, díos la hacienda, díos los hijos, díos la salud, díos la tierra, díos el cielo, díos el ser, díos mi gracia, díos a mí mismo, díoslo todo”, de modo que del dar, del hacernos todo bien, tomó el Señor su santísimo y augustísimo renombre de Dios en nuestra lengua española.

- Garcilaso
Es el arca de No-he,
que quiere decir “no tengo”.

Calambur inintencionado


Sin embargo, este doble sentido de los calambur no siempre es intencionado y a veces ha traído más de un problema. Por ejemplo, en Abril del 2007 Telemadrid lanzó una campaña de publicidad con el lema:

Telemadrid, espejo de lo que somos.

utilizando este eslogan tanto en los anuncios en la propia televisión como en vayas publicitarias, periódicos, etc. Sin embargo, pronto se difundió el segundo sentido de esta frase:

Telemadrid, Espe jode lo que somos.

Dando la casualidad que Esperanza Aguirre (Espe) era en esos momento presidente de la Comunidad de Madrid, y había sido acusada por los propios empleados de Telemadrid de "influir" en los espacios de información de la cadena. Claro está, tras popularizarse este segundo sentido se retiró la campaña publicitaria.

Adivinanzas con Calumbur


Y para terminar, una serie de adivinanzas que utilizan esta figura literaria, la cual ha sido siempre muy utilizada para crear adivinanzas para niños. Como siempre, las soluciones están entre los corchetes, así que selecciona el texto que hay en su interior:

- Por un caminito va caminando un bichito. ¿Qué bichito es? [La vaca]
- Oro parece, plata no es. ¿Qué es? [El platano]
- Este banco está ocupado, por un padre y por un hijo, el padre se llama Juan, el hijo ya te lo he dicho. [Esteban]
- Verde por fuera, blanca por dentro. Si quieres que te lo diga, espera. [La pera]
- Y lo es, y lo es, y no lo aciertas en un mes. [El hilo]
- Lana sube, lana baja, los ladrones la trabajan. [La lana]
- Si el enamorado es discreto y entendido, hay va el nombre de la dama y el color de su vestido. [Elena y morado]
- Te la digo, te la digo, te la vuelvo a repetir; te la digo veinte veces y no la sabes decir. [La tela]

¿Sabes más ejemplos de calambur? Dejalos en los comentarios :)

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Publicado por Javi Martínez el miércoles, 6 de abril de 2011

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